En nuestra sociedad actual, orientada hacia la creencia que todo se puede respaldar por las ciencias exactas, se olvida la importancia de las Humanidades. No lo entendáis mal, yo soy de ciencias, trabajo en un laboratorio de química y he obtenido un doctorado en química aplicada a la restauración de obras de arte... Pero al mismo tiempo soy consciente de que la balanza entre las inversiones y el gasto de recursos humanos no favorece a las Humanidades. De hecho, cada vez más se desprecian las actividades relacionadas con este área y se las remite al segundo y tercer plano de nuestra cultura. Esto sucede porque en general, no generan dinero ni ofrecen la seguridad de aquello demostrable, pesable y medible.
Las ciencias Humanas son esenciales para entendernos, para saber qué hicimos, qué errores y qué aciertos cometimos. La ausencia de estas disciplinas en nuestra sociedad es en parte una causa de la crisis económica, pero sobretodo de una decadéncia filosófica, ética y de valores. Una sociedad sin personas dedicadas a lo que es Humano no será una sociedad Humana, será otra cosa.
Las ciencias Humanas son esenciales para entendernos, para saber qué hicimos, qué errores y qué aciertos cometimos. La ausencia de estas disciplinas en nuestra sociedad es en parte una causa de la crisis económica, pero sobretodo de una decadéncia filosófica, ética y de valores. Una sociedad sin personas dedicadas a lo que es Humano no será una sociedad Humana, será otra cosa.
He visitado una página llamada "pinterest", donde los usuarios recopilan imágenes que les gustan en diferentes carpetas clasificadoras que son de libre acceso al público. En medio de miles de fotos de diseño, moda, graficos modernos, actores de cine, chicas guapas y chicos guapos se encuentran documentos históricos. Fotos hechas por personas que se interesaban por los Seres Humanos y los fotografiaban. El afán de estos preservadores de momentos hizo con que hoy, más de 100 años después, podamos ver fotogramas del pasado que de otra forma tendríamos que imaginar.
O'Sensei y su esposa
Nosostros estudiamos artes marciales japonesas. Artes marciales que están fragmentadas, han sido prohibidas, muchas eliminadas y algunas despreciadas o guardadas en secreto durante décadas. Contamos historias de lo que hacían, cómo luchaban, cómo vivian, pero no somos ellos. No los hemos visto. Las últimas generaciones que conocieron a los que habian conocido a los que habian visto a los Samurai estan desapareciendo. ¿Si no fuera por el trabajo de las Humanidades qué quedaría de esos mundos? De cierta forma todos los que estudiamos estos temas, los preservamos, trasmitimos y los vivimos nos convertimos en Humanistas a pequeña escala.
Abajo he subido algunas fotos de Samurai de bajo y medio rango. Fueron capturadas a finales del siglo XIX y principios del XX, probablemente por occidentales que entraban en contacto con el exótico mundo de Japón feudal. El choque cultural seguro que fue increíble: humanos con vestimentas, idioma, costumbres y microcosmos completamente diferentes. Guerreros con un código de conducta llamado Bushido. Como entrar en el mundo perdido o en el viaje al centro de la Tierra. Gracias a todos esos fotógrafos anónimos y a quien preserva y difunde estos mundos.
:)
Arquero
Samurai de alto rango o senhor feudal
(fotografia coloreada a mano)
Samurai en armadura sin casco (bajo rango)
(fotografia coloreada a mano)
Samurai en armadura sin casco (bajo rango)
(fotografia coloreada a mano)
(fotografia coloreada a mano)
Joven Samurai con su Katana
Samurai y sus armas
Samurai con su joven ayudante
Samurai con lanza
Samurai con lanza
El mismo Samurai con sus armas
Guerreros
(fotografia coloreada a mano)
Samurai posando con sus armas
Shomen
(postura de ataque frontal a la cabeza)
(postura de ataque frontal a la cabeza)
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